lunes, 26 de mayo de 2014

cruzar

el límite entre lo imaginado y lo real
es, a veces, una cerilla o un plato de arroz.
todos somos poetas ante un colchón y tus piernas desnudas.
seguimos inmersos en este mundo.
la nueva temporada trae episodios muertos.
suaviza el vino el melocotón.
soy un visionario del orden de los cubiertos.
yo, un hombre de ciencia, me dejo llevar por los sentidos de la vida,
por  el aire fresco que los regalos de la naturaleza desprenden.
por más que esta picadura se enrojezca no dejaré  de rascarme.
no he podido contenerme nunca.
las espadas no curan.
los besos arden como hielo sobre una herida.
la carne punzante, abierta, rezumando, palpitando.

No hay comentarios:

Publicar un comentario